Técnica:
Acuarela sobre papel
-LA
MANERA EN QUE SE CONSTRUYE LA IMAGEN.
En la
pintura “Frenesí” podemos observar
una serie de
elementos simbólicos, que
sufren una metamorfosis
en la forma, en
la que se
advierte como encaja
cada componente separados
puramente por una delgada
ranura, puesta instintivamente a
causa de que
cada trazo fue
situado en diferentes
etapas, en donde se le da gran protagonismo a el color
rojo, su gradación
y degradación; elementos sumamente
importantes en ella, en
el cual marcan finamente
la diferenciación de
cada tonalidad y
sus inconstantes formas,
que mediante una misma
línea buscan agruparse,
creando un mismo
elemento característico. Con ella
es posible representar, el frenesí
referido a la
locura.
-CÓDIGOS DE
REPRESENTACIÓN.
En
esta pintura se
pueden encontrar lenguajes y
códigos de representación que
permite llevar al
espectador a darle
diferentes significados, o
también al ser
llamada “frenesí”, puede conducir
a pensar que
es un “frenesí” diferente al
que se ha querido
representar, debido a que
hay símbolos que
quizá las personas
interpreten en pensamientos
divergentes.
Es frecuente
el uso de
formas orgánicas, formas
curvas y constantemente se
renuevan los espirales,
que son los
caminos, los recorridos
que probablemente llevan
a la demencia . No hay líneas
rectas presentes, ni figuras
geométricas, ni figuras estables.
Las formas o
elementos conservan entre
sí una similitud
formal.
-SÍMBOLOS
Nuevamente nombrando
unos de los
símbolos más particulares
son la conversión de la coloración
en el tono
rojo, en combinación
de colores primarios
para así transformándolos en
colores secundarios, el
estado de la
pintura y la
insistencia en el
cambio de las
formas orgánicas.
-ORDEN
FIGURATIVO O LABERÍNTICO
Señalando
reiteradamente el tratamiento
del color, el
cambio de tonalidad
y resaltando asimismo la
suavidad del trazo
a pesar de la distorsión
del matiz, y de
las formas, haciendo
una especie de
engaño visual, pues
en ella se
puede ver el
movimiento de las
figuras gráficamente de
una manera entretenida,
desequilibrada y desordenada,
pero que desde
una contemplación connotativa
habla de la exaltación
de las emociones,
en este caso
la locura, que
es la hace
papel protagónico , en conjunto
con otro elementos
característicos de la
pintura.
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